Una mala gestion de Outsourcing del desarrollo de software
1. Restricciones de comunicación.
Al buscar una empresa de desarrollo externa, es importante pensar en las zonas horarias y en las diferencias lingüísticas. Estas dos cosas pueden convertirse en uno de los mayores inconvenientes en su camino hacia la realización del proyecto.
Una gran diferencia de zonas horarias puede arruinar todo el proceso de comunicación. Esta es la razón por la que las llamadas y las reuniones se posponen o no se llevan a cabo. Además, si la empresa con la que trabaja no entiende lo que usted y su negocio quieren, ¿merece la pena intentarlo? Recuerde que un proceso de trabajo cómodo comienza con cosas tan pequeñas.
Una diferencia de 5 o 10 dólares en las tarifas por hora parece atractiva, pero al final va a costar un tiempo y unos nervios irrecuperables.
2. Una metodología empresarial diferente.
Todas las empresas tienen un ritmo de trabajo establecido que se adapta perfectamente a ese negocio en particular. Sin embargo, puede parecerle inusual a una persona ajena a la empresa. El equipo técnico está acostumbrado a un determinado sistema de gestión y a un conjunto de herramientas de seguimiento del progreso, lo que puede extrañar a la otra parte. Como cliente, al enfrentarse a un enfoque de gestión radicalmente diferente puede sentir que pierde el control de la situación y que ya no sabe hacia dónde se dirige.
Por supuesto, esto puede evitarse fácilmente discutiendo la estructura preferida del proceso empresarial desde el principio. De este modo, puede estar seguro de que la cooperación entre su empresa y el proveedor de externalización estará a la altura de sus expectativas.
3. Riesgo de robo de datos.
En definitiva, la subcontratación siempre conlleva riesgos. Usted comparte ideas, innovaciones y datos con terceros proveedores que pueden "tomarlos prestados" o utilizarlos como quieran. Aunque el equipo remoto con el que trabajas haya firmado el acuerdo de confidencialidad, no podrás tener un control absoluto sobre un proyecto externalizado
4. Costos ocultos.
Aunque las empresas tratan de subcontratar para ahorrar dinero y recibir un producto final de calidad excepcional, siempre existe el riesgo de recibir una factura enorme compuesta por tasas ocultas. Especialmente si se ha decidido subcontratar fuera del país.
Algunas empresas engañan al cliente con una doble facturación o dan una falsa sobreestimación. Los costes ocultos también pueden incluir llamadas telefónicas, reuniones, consultas adicionales e incluso los gastos de viaje. Al final todo se acumula, pero cuando estás en pleno trabajo, no hay marcha atrás